Rosalina Camps
Fotógrafa (1931) Bagà

A los quince años, compró su primera cámara, una Kodak que compartía con su hermano, y descubrió su pasión por la fotografía. “Las primeras fotografías que hice, sin conocimiento de nada, son las que más me gustan”. La obra de Rosalina destaca por su gran originalidad y carácter propio. Ha recibido más de un centenar de premios, especialmente durante los años 70, siendo una de las pocas mujeres de la esfera artística de la época. Entre otras personalidades de este ámbito, destaca su gran amistad con el pintor Rafael De Soto. Rosalina es una mujer astuta, con una habilidad innata para conseguir lo que se propone. En 1975, logró fotografiar al papa Pablo VI en el Vaticano haciéndose pasar por una reportera del diario Manresa. También, en una visita a Dalí, consiguió que le firmara un abrigo, que custodió con orgullo durante años. Hoy, Rosalina tiene 93 años y sigue muy activa, exponiendo su obra por todo el territorio, pero también continúa dando rienda suelta a su imaginación y creatividad. En la habitación de su residencia, tiene un despliegue de fotografías, cajas y cartulinas donde escribe, dibuja y recorta. A Rosalina le gusta contar las muchísimas anécdotas de las cosas que ha hecho y que le han sucedido en la vida. Una vida vivida de forma trepidante y apasionada, dedicada al amor por el arte, del cual es testigo.